Enoturismo en Cuenca | Visita bodega en Serranía de Cuenca
El enoturismo es uno de los motores que va a impulsar esta zona de la sierra, con lo que tiene una gran importancia para sus propietarios y un gran futuro del que quieren formar parte.
La historia de la bodega se remonta a hace más de una década, cuando sus propietarios quisieron aprovechar unos terrenos de los que disponían para que el monte no los engullera.
Desde ese momento comenzaron a elegir los mejores parajes para el cultivo de la viña y a estudiar qué variedades eran las que se podrían adaptar mejor a un terreno situado entre los 1.300 y los 1.435 metros de altitud. Tarea nada fácil, ya que en la zona nunca había habido viñas.
Tienen plantadas las variedades tempranillo, syrah, pinot noir y cabernet Sauvignon.
Sus vinos son muy especiales, con un potencial aromático más elevado y una concentración de color también más pronunciada, debido a la exposición tan elevada y directa de los rayos de sol a esa altura.
Pero sin duda, el elemento diferencial de esta bodega es su situación privilegiada en un Parque Natural en plena Serranía de Cuenca, idóneo para el turismo y enoturismo, y ser pionera en la región y posiblemente en el continente europeo, en el cultivo del viñedo a esta altitud y como consecuencia de esto, la obtención de un producto único y exclusivo.
Valoraciones
Todavía no hay valoraciones.